por Chema Rodríguez.
- A mi, sin duda, -le decía el ensayo a la novela, mientras tomaban unos marcapáginas en una biblioteca- cuando más me gusta leer al género humano es cuando celebran el solsticio de invierno, y lo que ellos denominan “carnes tolendas”, que es cuando, respectivamente, se quitan y se ponen las máscaras que ocultan sus verdaderas intenciones.
- Cierto -replicó la novela-, si los humanos no tuviesen esa enorme facilidad para mutar sus intenciones y comportamientos tal vez dejarían de sentir la predilección que siempre muestran por nuestro buen amigo el cuento.
Me encanta el género, espero algún día llegar a dominarlo medianamente bien, pero es complejo. Me ha gustado mucho este.
ResponderEliminarUn saludo!
Hola, Pandora, bienvenida. Bueno ya he visto que te gusta el cuento y que lo trabajas. Anímate a mandarnos uno pequeñín.
ResponderEliminarChema es un microrrelatista muy interesante, como se seguirá viendo.
Ese dialogo podría continuar para poder entender mejor a los humanos que es un género muy complejo. Blanca G.
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